Hoy en día es mucho más común encontrar dispositivos inteligentes en cualquier hogar en comparación a hace años. Cada vez surgen productos mucho más competentes de marcas conocidas que ofrecen funciones jamás antes vistas.
Según un estudio realizado por ISDI y Webedia, el 54% de la población española utiliza dispositivos IoT en sus hogares, y aproximadamente un 13% de los no usuarios están completamente abiertos a su uso en un futuro.
Por todo esto, los usuarios deben estar informados en todo momento de las implicaciones y medidas de seguridad a tener en cuenta, así como los métodos de protección de la red y sus actualizaciones, para mantener todos los datos privados al margen de los hackers. Para facilitaros esta tarea, os mostramos una serie de pasos sencillos para asegurar la protección de vuestro hogar inteligente.
1. Cambia las credenciales de inicio de sesión predeterminadas
No sería la primera vez que un atacante cibernético consigue vulnerar la integridad de un dispositivo inteligente debido a que no se ha configurado correctamente en cuestiones de seguridad. El paso más sencillo que podemos realizar para proteger nuestros dispositivos es cambiar sus credenciales de inicio de sesión, como el nombre de usuario y la contraseña. Es sencillo para un hacker encontrar la contraseña por defecto de un dispositivo si conoce su marca, tan solo debe hacer una búsqueda de menos de un minuto en Internet.
2. Jamás compartas tus credenciales
Siguiendo con el tema de las credenciales, jamás deberías compartirlas con cualquier otra persona. Puede parecer un poco obvio, pero aunque proporciones esta información a alguien de fiar nada te asegura que más tarde se pueda filtrar a un tercero. Esto puede ocurrir de diversas maneras: podrías utilizar un canal inseguro para comunicar esta información a la persona de confianza y que alguien intercepte los datos, o directamente podrías estar otorgando tus credenciales a una persona con malas intenciones. También por este mismo motivo es recomendable cambiar las contraseñas periódicamente, además de asegurarte de que estas cumplan con los requisitos mínimos para poder ser consideradas como seguras.
3. Separa la red de dispositivos inteligentes de la principal
Un buen método para proteger la red de tu casa es separándola de la red de dispositivos inteligentes. Si bien este truco no evita los ataques, sí que inhabilitará el acceso a tu red principal desde la red de dispositivos inteligentes una vez un hacker consiga vulnerar la seguridad de uno de tus aparatos. Esto se puede realizar principalmente de dos maneras: comprando dos routers o comprando un router capaz de separar redes a través de sus interfaces de red. La primera opción, por lo general, es más barata debido a que podemos utilizar el router proporcionado por la compañía de conexión a Internet junto a uno comprado con un precio asequible. La segunda opción puede ser más cara, ya que trata de reemplazar el router principal por otro con más y mejores funciones.
4. No confíes en cualquier marca
Existen empresas muy conocidas en el mundo de la electrónica e informática, tales como Google, Amazon o Xiaomi. Los productos de este tipo de marcas siempre son de calidad bastante decente y, sobre todo, suelen incorporar lo último en mecanimos de seguridad. Es por esto que no debemos fiarnos de marcas poco conocidas o sin usos contrastados (opiniones de clientes, …), pues estas no te garantizan de per se su legitimidad.
Debemos tener en cuenta que es muy posible que muchos de estos productos estén predestinados a averiarse debido a la obsolescencia programada. Esta práctica es mucho más común en empresas menos conocidas, pues las más grandes prefieren utilizar la obsolescencia psicológica para hacerte pensar que necesitas cambiar tu antiguo teléfono o electrodoméstico. Si como usuarios aprendemos a elegir y utilizar de manera correcta un producto, no nos arrepentiremos en el futuro.
5. Mantén el software actualizado
Siguiendo también con el punto anterior y teniendo en cuenta que cuanto mejor es el producto mejor software de seguridad debería tener, debemos asegurarnos constantemente de que nuestros dispositivos disponen de las últimas actualizaciones y, a poder ser, también de las más estables. En ocasiones incluso puede ser mejor sacrificar estabilidad a cambio de utilizar una actualización inestable pero con mejores mecanismos de seguridad, aunque eso depende completamente de tus gustos. Desde el hogar inteligente te recomendamos utilizar las actualizaciones estables, pues así evitarás posibles errores aún no corregidos en las nuevas versiones.
Conclusión
Como habrás podido leer, mantener tu hogar y tus dispositivos inteligentes es muchísimo más fácil de lo que parece. Es cierto que se puede profundizar mucho más en el tema, pero debemos saber, sobre todo, cuales son los pasos básicos y más sencillos para proporcionar una capa extra de seguridad a nuestros datos. Cosas tan sencillas como cambiar la contraseña por defecto del router apenas lo hace nadie, y es uno de los pasos más importantes para mantener tu red segura. Tampoco es muy común disponer de dos redes en casa, aunque es completamente recomendable ya que de ese modo es prácticamente imposible que puedan acceder a tu red principal. Con todos estos consejos, ¡esperamos haber convertido tu hogar en mucho más que una caja fuerte!